El humo, actualmente, es el causante de las enfermedades relacionadas al tabaquismo. A tal punto que fumar es una actividad que tiene espacios más reducidos. Los mismos que se han desplazados a terrazas, salidas de edificios, entre otras; pero hay algo que aun preocupa: el olor a cigarrillo.
Philip Morris International (PMI), con esa primicia, trabajó para cambiar los hábitos de fumadores y generar espacios más limpios para los fumadores. Así, creó IQOS MESH que funcionan con baterías y vaporizan un líquido que contiene nicotina, entre otros.
La iniciativa nace luego de descubrir que en el aire, luego de que hubo humo de tabaco, queda contaminado y lleno de residuos químicos que afectan al organismo.
Así lo confirmó Universidad Drexel, en Pensylvania, en 2018. Los científicos a cargo de la investigación descubrieron que cuando el humo y los contaminantes aéreos del tabaco se solidifican son partículas nocivas tienen la posibilidad de entrar en los pulmones, poniendo en riesgo a bebés, mujeres embarazas y otros grupos vulnerables.
Con el cambio de tecnología, PMI entró a 44 países con su nueva tecnología; entre ellos Ecuador. Jerónimo Meneses, periodista, productor de radio y comediante tuvo la oportunidad de consumir el producto de vaporización.
Según él, el producto le permite tener la sensación de un cigarrillo, pero que el olor es totalmente amigable. “A pesar de que me gustaba fumar, el olor que dejaba no me tenía contento y ante eso decidí dejarlo. Hoy, con el nuevo producto, mis manos y mi ambiente tienen un olor diferente”.
El IQOS MESH tiene un centro de investigación y desarrollo en Suiza así como un laboratorio de investigación en Singapur. Adicionalmente, ha establecido centros de innovación en las capitales líderes en innovación como son Tel Aviv y San Francisco con la intención de seguir mejorando el producto.