Carla Gordón es de aquellas personas que contagian emoción al primer instante. La vitalidad que irradia al conversar habla de su pasión y entrega. Dotes admirables y esenciales para quien ha orientado su vida en la comunicación. Y precisamente comunicar, algo que están cotidiano en nuestro día a día, para Carla es su razón de ser.
Presidenta del curso, amante de la política y líder nata, Carla siempre ha sido pura energía. Ese ímpetu de su infancia y juventud forjaron su carácter y la convicción de ir siempre más allá de lo que se espera. Así nació One to One, una consultora de relaciones públicas y comunicación, para la cual cada cliente tiene una particularidad propia que requiere un análisis propio y una solución única.
Carla no quería que las relaciones públicas se siguieran manejando de manera convencional. Para ella, la innovación es clave para poder responder a lo que demandan las empresas. Esta estrategia le ha permitido que sus clientes puedan construir vínculos reales en sus entornos de acción y obtener resultados.
Pero detrás del modelo de negocio, hay un motor aún más potente: el compromiso con el liderazgo femenino. One to One es una agencia conformada en un 90% por mujeres, muchas de ellas madres que encontraron aquí la oportunidad que buscaban para crecer profesionalmente, gracias a las capacitaciones que reciben de expertos nacionales e internacionales. Porque para Carla, el crecimiento no se mide solo en facturación, sino en oportunidades. “Yo no quiero ser la mujer con mil clientes. Yo quiero calidad: en el equipo, en los servicios, en los resultados. Y eso no se negocia”.
Dentro del portafolio de servicios de One to One hay relaciones públicas tradicionales, imagen personal, comunicación de crisis, marketing de influencia y PR comercial enfocado en resultados de venta. Pero, como ella misma lo dice, no todo cliente es para su agencia. “No vendo humo. Si no veo un objetivo claro o si el cliente no encaja con nuestra visión, prefiero decir que no”.
A pesar de su enfoque empresarial, tiene claro que no todo en su vida gira en torno al trabajo. Lo personal y la vida privada no se descuida: ama el deporte y lo practica con disciplina y constancia.
Carla ha logrado que cada decisión que toma sea coherente con sus principios y sus valores. El impacto que ha logrado en la vida de su equipo y sus clientes es innegable. Porque cuando se actúa con propósito, los resultados llegan, perduran en el tiempo y, sobre todo, marcan la diferencia.