La experiencia de Volvo se diferencia de cualquier otra: se distingue por el envolvente sentido de lo que vemos y sentimos. Un Volvo impregna nuestras pupilas y visión como no lo hace ningún otro vehículo. Por ello debemos adentrarnos no solo en su tecnología de primer orden, en sus líneas y prestaciones, sino en el diseño característico del Volvo y en su desempeño que se da gracias a todos esos factores y es por completo diferente, una experiencia fuera de serie.
Es que Volvo es un estilo, es una forma, es un concepto de clase. Volvo es una identidad de marca que conduce al usuario hacia un panorama diferente, hacia una experiencia singular. Es un sinónimo de lo que de veras es excepcional. Seguridad, diseño, tecnología, clase. Nada se compara con lo que un Volvo puede ofrecer. Cuando hablamos de un XC40, en particular sobre su versión R-Design, nos referimos a un SUV compacto del tamaño ideal para una familia, de un modelo mediano, ni muy grande ni muy pequeño, pero con todas las comodidades. Se trata de un modelo que se mueve con igual seguridad en el tránsito citadino o puede conducirse fuera de la urbe.
Si hay una palabra que define su diseño es vanguardia. No exageramos en lo más mínimo. La versión deportiva de la R-Design muestra detalles que contrastan magníficamente con el color general o el diseño, un negro brillante en la parrilla delantera, retrovisores, ventanas laterales y placas protectoras de los parachoques, por ejemplo. Contraste y belleza para un auto de elegancia escandinava. Todo ello al servicio de sus tripulantes, de los viajeros que conquistan la ciudad o las afueras de la ciudad en viajes cómodos, seguros, fantásticos. El XC40 está acoplado por completo a las necesidades de comunicación y comodidad de sus pasajeros y se mueve con la naturalidad de un vehículo nacido para aferrarse al asfalto, como una extensión y prolongación de nuestro cuerpo.
Su diseño permite que la aceleración del Volvo no sea más que un breve respiro para quien va dentro en un vehículo de 254 hp de potencia y torque de 350Nm. La aceleración es una brisa en el modo eco, en el modo deportivo es fastuosa. También contamos con un chasis deportivo estándar para el XC40 R-Design que ofrece una capacidad focalizada de respuesta al volante. El chasis opcional Four-C activo proporciona más control.
Al llegar en uno de estos vehículos, se activan sus dones: al parquear cuenta con una cámara de 360° que permite una mejor visión para evitar un incidente. Gracias al sistema City Safety, el XC40 R-Design puede identificar potenciales obstáculos y recomendar al conductor tomar las precauciones del caso e incluso frenar automáticamente en caso de un incidente mayor o un posible impacto. Volvo es una marca de distinción y seguridad, es un hecho. Eso es su XC40: seguridad, estilo, clase.